EN LA VIÑA DEL SEXO ENCONTRAMOS DE TODO

A mis queridos seguidores

Todo es posible en la viña del sexo, Yo Gatita, me considero una mujer dominante, libertina, tomo lo que quiero, y odio que me exijan hacer lo que no quiero.

Pero hay momentos que soy dominada, arrebatada y sin negarlo, termina gustándome cierto maltrato en la hora de un momento sexual.

Siempre he creido que en el sexo todo es permitido, aunque diga que no lo quiero, es placentero encontrarse con ciertos caballeros sensibles en su diario convivir, pero furiosos a la hora de complacer a una mujer (furioso en el sentido de intensidad, mas no de mal genio).

De seguro encontrarse con estos complacientes, te dejan elevado el líbido para seguir en los siguientes rouns...indiscutiblemente, se queda complacida.

Esto me recuerda el encuentro con un amante pervertido que sin querer terminamos cómplices de esos que todo lo permitimos. Fue uno de esos momentos que me invitó al cumpleaños de una amiguita; asistimos cuatro parejas, las conversaciones, los tragos y luego el acercamiento, la cumpleañera muy atenta estuvo con todos y en especial conmigo, puesto que yo era la nueva amiga invitada...simpre me defino de disfrutar el sexo a su mayor plenitud, cuando tengo la oportunidad...de igual manera no me imaginé que sería el centro de atención de todos o mejor dicho a quien inauguraron, esto fue como una orgía al cual lo disfruté a lo máximo...pero esto no es el centro de mi relato, sino de mi amante pervertido.

Mi amante pervertido, es una persona muy culta, y en el grupal se portó con altura, pero casi llegando al amanecer él buscó los pretextos para sacarme de aquella casa para llevarme a su cama cómplice de nuestras travesuras...un galán que se transformó en mi exclavo de nuestra intimidad...experimentar palmadas y expresiones que nunca las presentas, un sexismo permitido por la consigna de disfrutar un sexo totalmente distinto, en el cual te sientes poderosa y así misma exclava de tus bajos instintos, el cual nunca habría experimentado en toda mi vida delictiva. Toda esta experiencia que vivo con mi amante pervertido, la tengo cuando mis bajesas se saturan de lo tradicional y quiere un poco de violencia...(claro que no lo vean como una maniática), esto me lleva a la siguente fase, de mi continuidad de seguir buscando placeres de la carne y de encontrar hasta donde llegan mis limitaciones que aún no las encuentro.

Así mismo recuerdo de aquella persona, que con tanta insistencia y espera, me invita a expresar sus atributos, que nada malos estaban...un caballero de buena presencia, una excelente talla...luego de una larga charla en el centro comercial, decidimos iniciarnos según lo planeado, las puertas del motel se abrieron, la habitación estaba sencilla a lo que esperaba, no se esperó tanto para empezar con los besos, las caricias, habríamos pasado unos quince minutos, cuando este caballero sacó su miembro, que sin desmerecerlo estaba bien plantado, intenté darle una mamada, estaba muy bonito como para no disfrutarlo y saborealo, me llamaba  y me pedía telepáticamente a gritos y con llanto que me lo chupara, me lo comiera; tantas cosas pensé en una milésima de segundo, que dispuesta a complacerlo, pero tanta fue mi ansiedad y más la de él, que lo que obtuve fue todo su semen en una de mis manos...y se terminó el encuenro...(imagínesen como quedé Yo),  al final me tocó llegar a casa alborotada y sin éxito alguno...hasta este momento no hemos podido volvernos a encontrar.

Las ironías de las cosas, como dije en la viña del sexo existe de todo...a veces se gana un excelente momento sexual como el peor tiempo perdido.

Los amo

Gatita

MI RETORNO, EL EGOÍSMO DE UNA NUEVA EXPERIENCIA

A mis queridos amigos, seguidoras y seguidores de esta su servidora, que cada día que pasa, quiere llegar a mis limitaciones que aún no los consigo...esa búsqueda del placer que el sexo siempre  se dispone en presentarme y que por esa vida retrógrada que la sociedad me obliga a tener, se me intensifican esos deseos lujuriosos que me llevan a dar un paso más allá de mis estribos...y pese a que en ocaciones parece encontrarlos, sigo deseándo llegar al siguiente nivel.

Ese nivel que de repente me reprime por pensar alguna vez regresar a la racionalidad retrógrada de mi vida social...esta mi naturaleza delictiva ha provocado el fracaso de mi razón a mi irracionalidad de una gata ronroneando en los tejados caliente de mi bajos instintos.

Entre tanta búsqueda de mis limitaciones, me recuerdo de una de mis experiencia delicitivas que de repente imaginé no alcanzarla o simplemente no tener el valor de realizarla...ya había pasado un par de años desde que  tuve mi último encuentro...ya estaba con la cosquilla de salir de mi monogamia obligada (apenas salía con alguien que nos encatrábamos de vez en cuando con un sexo muy básico)...en donde vivo, no se me permite pasar el límite por el trabajo que realizo...pero ya mis bajesas no dejaban en paz mi inconciencia, mi naturaleza me exigía volver a lo que complacía mi cuerpo y que había negado por la supuesta sociedad que me marcaba mi paciencia y mi lujuria reprimía.

Me había puesto a la búsqueda de esa fantasía, un gam bang, tres hombres, no se, tenía que ser algo diferente a lo que ya había experimentado y que mi cuerpo se sentía inconforme; las posibilidades estaban muy lejanas, siempre aparecía uno que otro oportunista o algún patán confundido de lo que Yo realmente buscaba...estaba ya casí resignada a quedarme con lo que ya había experimentado mi lujurioso cuerpo.

Por cosas de trabajo, tuve que trasladarme a la capital, y aproveché para encontrarme con esos amigos que había escogido para ver la posibilidad de cumplir una de mis fantasías. Lamentablemente algunos muy apurados, otros no me convencieron...como si el cosmo hubiera estado a mi favor, una de esas noches, me cité con una persona que me invitó a salir y a tomar unos vinitos hervidos, pero como se tenía que regresar temprano, se marchó y me dejó picada...regresé al hotel en donde me había hospedado, y decidí ver una pelicula triple X; no me quedaba más que complacerme a mi misma.

Debo indicar que en mi vida delictiva, siempre he tenido un cómplice quien me acompaña a mis encuentro, mi amigo, mi protector en mis salidas, esa noche me envía un mensajito como siempre, y le dije que me encontraba con todas las ganas de tener un encuentro...él sabía de lo que le decía, y de que era lo que quería; fue por mí y llamamos a un amigo cómplice también de mis bajesas, quien nos invitó a su departamento.

Ya había pasado casi tres años que no nos veíamos que fue muy grato nuestro reencuentro, nos esperaba con la sorpresa de estar con tres amigos más; dos hombres y una mujer bi...vaya sorpresa!...mi consentidor con una sonrisa me susurró al oído...se te hizo!...sí, se me hizo!.

Nos presentaron a nuestros nuevos amigos en común, buscadores de nuevas experiencias, muy agradables una pareja de esposos y un amigo de ellos, conversamos temas interesantes, nos tomamos unos tragos escuchando música de los años 80's, recordamos esa época que la disfrutamos en nuestra adolescencia; luego nos impulsamos a bailar y después a pasar a lo erótico y 
seductivo...parece que al lugar donde vaya, siempre llamo la atención de todos, puesto que ellos fijaron su mirada e intensiones lujuriosas en mí...Yo sinceramente no fui a complacer a nadie, sino a complacerme, que luego que uno de ellos inició con mi nueva amiga a desnudarla, los tres demás se inclinaron a hacerlo conmigo. 

Estaba tan seducida por la ocasión, que no me importó estar en medio de los tres hombres apasionado quienes me tomaban de las distintas formas que ellos deseaban...(se los dejo a la imaginación), me encantó tomar el control de todos y a su vez ser tomada por ellos, ese departamento era demaciado chico para lo que mis bajesas me llevaron a hacer, lo tomé cuanto quise y me dejé tomar como ellos y yo quise que me tomaran...todo ello compensaba tantos años reprimida en mi monogamía hipócrita...tuve sexo en varias expresiones que mi lujuria estaba buscando...tan fascinante fue aquello que cuando nos dimos cuenta, ya la mañana nos había tomado por sorpresa y el agotamiento de toda una noche de bajesas.

Mi monogamia se había roto, mi naturaleza volvía a surgir, me había reiniciado ese día, mi mente estaba abierta a solo disfrutar ese momento, sólo quería complacer mi cuerpo, dejar riendas suelta a mis bajesas, no me importó si mi nueva amiga lo disfrutó, era egoísta en mi mundo delictivo...y así soy en cada encuentro que tengo...con ello me llevó al siguiente nivel; llegar a mis limitaciones que aún no las conozco, pero que espero llegar a conocer.

Si quieren que las experiencias cumplan sus objetivos, solo piensen en complacerse y sentirán la conección con quienes participan en sus fantasías. 

Los amo

GATITA