A mis seguidor@s de esta su Gata ronronera que anda por los tejados calientes en busca de su gato ronronero; aquí ya con un año más liberando mis instintos, siendo una delictiva de mis bajezas, expresando diariamente lo que me gusta y haciendo conocer lo que busco y deseo...
Un año más de mi existencia, haciendo de las mías, complaciendo a mi cuerpo lujurioso, desde los cabellos hasta las puntas de los pies...esto me recuerda a aquel caballero quien me invitó a pasar un domingo para relajarme, ya que en días anteriores mis encuentros me resultaron casi fortuitos y todo un chasco, lo triste, limitada a mis bajezas.
Antes de culminar el año, mis encuentros inesperados se fueron dando, pese a que alguién confundió las cosas de lo que yo quería a lo que él deseaba, me invitó a un intercambio con una pareja...la verdad, no me agradó la parejita, él luego de estar con su pareja, estuvo conmigo, pero como si hubiera sido para mí un suplicio, en comparación a su pareja que disfrutó estar con mi pareja quien también disfrutó su intercambio...yo?, solamente me quedé observando como los dos disfrutaban de su encuentro...salí peor que como llegué, con los deseos a flor de piel, deseaba que me hiciere algo más. pero la parejita se disgustaron frente a nosotros...tal vez aquello era que no me inspiraban agrado...me dejaron en mi casa, y al llegar un amiguito me llamó para invitarme a cenar, de la hambruna le acepté que fuera por mí; nos fuimos a un restaurant cerca de donde me encontraba, una tras otra conversación se vinieron mis pensamientos perversos, la gata delictiva se encontraba frustrada...que muy disimuladamente le fui accediendo irnos a un lugar más íntimo...le dije que me hiciera sexo oral, el cual me produjo varios orgasmos hasta llegar a mi máxima excitación y culminación. Debo recalcar, que no fue al inicio la intensión de llegar a la intimidad, pero bajo lo reprimida que había quedado con mi encuentro, no me quedó que aprovechar la disponibilidad que mi nuevo cómplice tuvo conmigo. Lo peor que se debe de hacer es dejar a tu pareja con las ganas de todo, porque puede que encuentres a alguien predispuesto a calmar tus deseos...me pasó a mi!...jajaja.
Pero aquello no fue todo...como aquel que llamó mi atención en lo de las experiencias distintas, las pocas veces que nos encontramos, me dejó toda alborotada, con deseos de que me cogiera como a las gatas en celo, sostenidas del cuello...jajajaja...su juego se hizo muy morboso que no hubo tal que pudiera explotar mis bajezas, me sentí tan limitada, que al final me obligó a buscar a mis cómplices para que me quitasen tanta lujuria acumulada, pues quería que por lo menos tres hombres saciarian mi lujuria, estaba predispuesta hasta ser flagelada si fuera preciso para quitar mis bajos deseos...pero solo pude encontrarme con un trío hmh, el cual lo disfruté, pues mis caballeros se manejaron miembros respetuosos en sus accionares...pero sinceramente, no fue suficiente, buscaba algo diferente...mi querido amigo, provocó en mí experimentar algo distinto...
Me hizo seguir buscando mis limitaciones, y así también, encontrando los espacios de mi cuerpo sin descubrir, encontrando las mil y una sensación que mi cuerpo aún no se ha podido expresar...era ya el medio día de ese domingo, cuando llamó mi caballero a mi celular para indicar que se encontraba esperándome, y fui a su encuentro; ya le había indicado que deseaba tener sexo oral; estab muy predispuesto a complacerme, el cual me produjo mil orgasmos con su boca...llegué mil veces al cielo y al infierno con tanto pecado capital...morí del deseo y del placer que su boca provocaban en mi sexo...otra experiencia distinta del que me expresaba mi amigo anterior, estaba experimentando, era la gloria...luego el jacuzzi nos sedujo para acobijarnos entre las espumas y el agua caliente...que sabroso fue sentir ese hidromasaje que expulsaba de las paredes de la tina del jacuzzi...le pedí a mi caballero que un masaje en los pies relajaría mis sentidos, el cual inició, pero muy curioso sentir placer al masajearlo, luego no chistó en acariciarlos y besarlos, subía la intensidad de mis deseos, deseaba que no terminara de hacerme lo que hacía, me gustaba, me excitaba, me hizo tener varios orgasmos, estaba complacida, durante mi larga vida delictiva, el sexo oral no fue tan deseado como los besos y las caricias a mis pies...otra experiencia distinta...cada vez mi cuerpo se sigue reconociendo y a medida que pasa aquello, se extiendo mis limitaciones a la línea de lo no permitido...mi caballero de la sonrisa nerviosa, supo hacerme reconocer un punto más erógeno de mi cuerpo, dejó que me manisfestara e hiciere con él lo que mis bajezas me pedían de él.
Pero mis complacencias no terminan allí, me ocurrieron algunas experiencias más, que en adelante les he de relatar...pero sí con el aprendizaje de vida, de seguir permitiéndole a mi cuerpo la libertad de expresar mis bajezas y mis intintos con el cuerpo que el mío lo hayan motivado.
Que tengan un feliz 2017...
Los amo Gatita...
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